OTRA BONITA HISTORIA DE UN BUHO

El búho gafitas
Asomaba la cabecita, desde su casita en el tronco del árbol un búho con una carita muy divertida. Trabajaba durante la noche dando las horas como si fuera un reloj para que los animalitos del bosque supieran que hora era en cada momento. Su gran ilusión era salir de su casa durante el día, pero sus ojitos no veían bien y tenía que conformarse con salir de noche y abrir sus grandes ojazos que brillaban en la oscuridad. – Siempre me dicen que soy afortunado por tener esos ojos tan grandotes -decía el búho.- Pero no saben -añadía- que aunque son tan llamativos, no veo las cosas tan claras y lindas como la gente las ve. Salía durante la mañana pero a pocos metros se caía, y siempre decía: – Otro tropezón, otro tropezón, pero no me importa, sólo quiero ver el sol. Muy preocupado llamó a su amiga la ardilla Felisa, que vivía en un árbol cerca del suyo. – ¡Felisa, Felisa, ven un momentito por favor! Tengo un problema y como tu tienes fama de lista, tal vez puedas echarme una mano. – ¿Qué te ocurre búho?, preguntó la ardilla Felisa. – Tengo que salir de día, quiero ver los animalitos que juegan durante la mañana y ver el lindo color del cielo cuando se pone el sol. Quiero ver corretear a los conejos, y pegar brincos a los saltamontes y también como dan saltitos los pequeños pajarillos de mi árbol. – Tengo la solución, dijo la ardilla. – Iremos al conejo oculista y te pondrá unas gafas especiales para ver durante el día. El búho estaba muy guapo con sus nuevas gafas, y así se cumplió su sueño, paseaba y paseaba y tanto salía durante el día, que al llegar la noche se quedaba dormido y sus amigos le decían: – Búho, no te duermas, que tienes que dar las horas. Después de muchos días se dio cuenta de que debía utilizar su tiempo mejor y decidió dormir algunas horas durante el día, así cumplía su deseo y por las noches no se dormía durante su trabajo.

Este cuento corto, el búho gafitas, es una muestra de como un cuento puede usarse en la enseñanza de la matemáticas, ¿Como? pues ya vemos, que se trata el tema de la hora, con este cuento puede introducirse al niño y a la niña en el tema de la hora, minutos, segundos, concatenándolo con los conocimientos vagos que ya traen de su casa, de su entorno. El maestro o maestra solo debe preparar las estrategias necesarias para sacarle el máximo provecho a esta historia, tanto en el área de lengua, matemática, geografía o ciencias (husos horarios, meridianos). es solo ponerle un poco de ganas y tratar de cambiar nuestras estrategias y metodologías de trabajo en el aula.(Rynès)